[ad_1]
Los moscovitas rinden homenaje al jefe mercenario, aunque sólo unos pocos se atreven a mostrárselo al ejército: “Creo que fue Shoigu”
Misha mira al suelo y habla en voz baja: “Lo siento, pero es demasiado pronto para decir quién fue”. Estamos a dos cuadras del Kremlin, donde hasta última hora de la tarde un grupo de fieles moscovitas y algunos curiosos vienen a observar o presentar sus respetos al líder Merit.
Consigue Premium desde 1€ el primer mes
Aprovecha esta oferta limitada y accede a todo el contenido web
[ad_2]