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Al amparo de la oscuridad en los distritos occidentales de París, activistas armados con cubos de pegamento y miles de carteles se pusieron a trabajar.
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Pasan la tarde del domingo pegando en las paredes fotografías de israelíes y otras personas secuestradas por Hamás el 7 de octubre, en un esfuerzo por mantener su difícil situación ante la opinión pública.
“Nunca lo gritaremos lo suficiente, nunca lo diremos lo suficiente, nunca lo mostraremos lo suficiente”, declaró Léa Hanoune, de la Unión de Estudiantes Judíos de Francia (UEJF).
La campaña de carteles es una rama de una campaña similar lanzada en Nueva York por artistas israelíes, que desde entonces se ha extendido a Buenos Aires, Lisboa y otras ciudades del mundo.
Militantes del grupo islamista palestino Hamas, respaldado por Irán, invadieron Israel desde la Franja de Gaza el 7 de octubre, matando a más de 1.400 personas, en su mayoría civiles, y tomando más de 200 rehenes, dicen funcionarios israelíes.
El Ministerio de Salud de Gaza, dirigido por Hamas, dijo el lunes que más de 5.000 personas, en su mayoría civiles, habían muerto en ataques israelíes de represalia contra el territorio palestino. Su número de muertos supera los 2.000.
“Sentido del deber”
La cuestión de los rehenes es particularmente grave en Francia, que tiene la mayor población judía de Europa, alrededor de 500.000 personas.
La UEJF afirmó el domingo que alrededor de 100 activistas habían utilizado 30 coches para distribuir unos 4.000 carteles.
“A menudo en las redes sociales se ve mucho odio, mucha desinformación”, dijo Hanoune.
“Esa es otra razón por la que hacemos esto: luchar contra la desinformación”.
El grupo UEJF está coordinando la acción con un grupo autodenominado Colectivo 7 de Octubre.
“El objetivo es concienciar al público en general, dar un rostro a los rehenes, devolverles la vida”, explicó Sophie Kijner, miembro del colectivo.
El domingo por la tarde en París había estudiantes, activistas, jóvenes profesionales y personas mayores motivadas por lo que algunos llamaban sentido del deber.
Los carteles llevan la palabra “secuestrado”, así como fotografías y los nombres y nacionalidades de los rehenes, de países como Israel, Francia, Argentina y Estados Unidos.
“Deben volver con vida”, decían los carteles.
Las campañas de carteles en otras ciudades ya han generado controversia, y algunos carteles han sido arrancados.
El colectivo dice que no es político, pero algunos carteles llaman a Hamas “terrorista” y etiquetan al grupo como enemigo tanto de Israel como de los palestinos.
“Los palestinos también están bajo el yugo de Hamás”, afirmó Sarah Ouakil, de la UEJF.
“No lograremos una solución de paz si un grupo terrorista controla tierras palestinas”.
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