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La ceremonia anual de premios del cine francés dio un giro sombrío el viernes con una ovación de pie para la actriz Judith Godrèche, quien habló contra la violencia sexual en la industria cinematográfica.
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El thriller “Anatomía de una caída” dominó los máximos honores del cine francés con seis trofeos, incluido el de mejor película, lo que le dio un nuevo impulso antes de los Oscar, para los que tiene cinco nominaciones.
Pero los ganadores y perdedores de la velada quedaron eclipsados por el discurso de Godrèche, que subió al escenario para denunciar “el nivel de impunidad, negación y privilegios” en la industria.
Godrèche, que se ha convertido en una figura destacada del movimiento francés #MeToo, acusó a los directores Benoit Jacquot y Jacques Doillon de agredirla sexualmente cuando era una adolescente. Ambos niegan las acusaciones.
“¿Por qué aceptar que este arte que tanto amamos, este arte que nos une, sirva de tapadera para el tráfico ilícito de niñas?” ella dice.
“Hay que tener cuidado con las niñas pequeñas. Tocan el fondo de la piscina, chocan, se lastiman pero rebotan”, dice.
Justine Triet, que se convirtió en la segunda mujer en ganar el César a la mejor dirección por “Anatomía de una caída”, dedicó su premio a las mujeres heridas.
El thriller sobre una mujer acusada de asesinar a su marido es uno de los mayores éxitos internacionales del cine de autor francés de los últimos años.
“Quiero dedicar este César a todas las mujeres (…) a las que triunfan y a las que fracasan, a las que han sido heridas y se liberan hablando, y a las que no triunfan”, declaró Triet , que en mayo se convirtió en la tercera cineasta en ganar la Palma de Oro.
“Cambiar hábitos”
La ceremonia de entrega de premios del viernes ofrece un marcado contraste con la edición de 2020, donde Roman Polanski ganó el trofeo al mejor director por “El oficial y el espía”, lo que provocó que la actriz Adèle Haenel saliera furiosa en señal de protesta.
Polanski sigue siendo técnicamente un fugitivo de la justicia estadounidense por una condena por pedofilia en la década de 1970.
La cuestión de la violencia sexual se planteó desde el primer momento en París con el discurso de presentación de la actriz y directora Valérie Lemercier, que presidió la ceremonia.
“No saldré de este escenario sin saludar a quienes están sacudiendo los usos y costumbres de un mundo muy antiguo donde los cuerpos de unos estaban implícitamente a disposición de los cuerpos de otros”, afirmó.
El primer premio de la velada fue para Adèle Exarchopoulos a la mejor actriz de reparto por “All Your Faces”, en la que interpreta a una víctima de incesto.
El director de “Oppenheimer”, Christopher Nolan, recibió un César honorífico.
Antes de la ceremonia en el Olimpia, alrededor de un centenar de personas se manifestaron frente a la sala ante el llamado del sindicato CGT para apoyar a las víctimas de violencia sexual.
“Todos juntos realmente podemos ayudar a que las cosas cambien, se puede abrir un mundo verdaderamente mejor”, dijo la actriz Anna Mouglalis, quien acusó a los directores Doillon y Philippe Garrel de agredirla sexualmente.
Antes de la entrega de premios, la ministra francesa de Cultura, Rachida Dati, deploró una “ceguera colectiva” que “dura desde hace años” en el sector, en una entrevista con la revista Le Film Français.
“La libertad creativa es total, pero aquí no estamos hablando de arte, estamos hablando de delitos infantiles”, dijo sobre Godrèche.
Godrèche, de 51 años, afirmó que Doillon, de 79 años, se aprovechó de ella al dirigirla en una de sus películas cuando tenía 15 años.
También acusó a Jacquot de violarla durante una relación de seis años que comenzó cuando ella tenía 14 años y él era 25 años mayor que ella.
El cine francés se ha visto sacudido por acusaciones de que ignoró el sexismo y los abusos sexuales durante décadas, así como por críticas de que las artes encubrieron los abusos durante demasiado tiempo.
La leyenda del cine Gérard Depardieu, de 75 años, ha sido acusado de violación y de acoso y agresión sexual por más de una docena de mujeres. Él niega las acusaciones.
El presidente Emmanuel Macron fue criticado por sus comentarios en defensa del actor, quien, según dijo, se había convertido en el objetivo de una “persecución humana”.
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