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Geert Wilders sólo tenía una buena noticia que celebrar la semana pasada: su victoria electoral. Después El líder de la extrema derecha holandesa. ganaría las elecciones holandesas, sólo recibió un fracaso tras otro. El viernes, la líder liberal Dilan Yesilgz se negó a formar un gobierno de coalición con su partido. Y este mes, el mediador designado por la formación de más salvajeél Partido de la Libertad (PVV), renunció tras verse involucrado en un escándalo de corrupción.
En Holanda, el partido que gana las elecciones nombra un mediador que se encarga de establecer contacto con el resto de partidos para negociar una posible coalición de gobierno. El elegido por Wilders fue el senador del PVV Gom van Strienun veterano político de 72 años que iniciaría conversaciones con los demás partidos el lunes.
Sin embargo, el periódico holandés RNC reveló un presunto caso de soborno y fraude que le afecta directamente y que forma parte de un Informe de la Universidad de Utrechtél mismo habla de una posible malversación de dos millones de euros de fondos públicos a una empresa privada en la que él mismo participa.
Wilders actuó rápidamente y obligó a dimitir a su elegido. tras asegurar que “no sabía nada” sobre el caso, que se conoció entre este sábado y lunes. También nombrado un nuevo mediador: Ronald Plasterk, que esta vez proviene del centroizquierda y es profesor en la Universidad de Ámsterdam. El líder islamófobo admitió su error: “No es el comienzo que soñé con iniciar las discusiones para la formación de un Gobierno”.
La prensa holandesa irónicamente dice que las conversaciones para conseguir la mayoría en la Cámara Baja holandesa no podrían haber empezado peor y que el propio Wilders es consciente de ello.
La semana pasada, Plasterk escribió un artículo en el periódico holandés. telegrama en el que pidió una coalición de derecha entre el PVV, el Nuevo Contrato Social (demócratacristiano, NSC), el Movimiento Campesino (BBB) y los liberales Yesilgz (VVD)): “¿Qué se debe hacer ahora? No es una pregunta difícil. Hay que hacer justicia con los resultados electorales. Los ganadores son PVV (37 escaños), NSC (20) y BBB (7) y – definitivamente un perdedor, pero sigue siendo grande, es el VVD (24). Juntos tienen una gran mayoría y muchos puntos comunes en el programa”, escribió.
Esta mañana, los líderes de los partidos políticos holandeses se reunirán de nuevo para iniciar las primeras conversaciones para formar alianzas que den lugar a un nuevo Ejecutivo.
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