Estados Unidos, “el mismo enemigo” para Rusia y Cuba

El presidente cubano Daz-Canel se aferra a la propaganda rusa y respalda a Putin en la invasin de Ucrania durante su viaje a Mosc

• Cuba Miguel Daz-Canel visita Mosc en medio del acercamiento con Washington

De pie, vestidos de civil pero plantados como si fueran militares. Vladimir Putin y Miguel Daz-Canel rindieron honores este martes a la estatua de Fidel Castro inaugurada en Mosc, entre banderas y rosas rojas y con mucho fro. El “sentido homenaje” de ambos mandatarios escenific la estrecha alianza entre Cuba y Rusia, segunda parada del viaje intercontinental del sucesor de los Castro, que proseguir en las prximas horas camino de Turqua y China.

Una alianza que justifica el espaldarazo del dirigente cubano a su amigo ruso ante el “mismo enemigo, el imperio yanqui, que ha manipulado tambin a una parte importante del mundo. Rusia siempre puede contar con Cuba“.

Reciprocidad que Putin se encarg de destacar: “Siempre hemos apoyado a Cuba en la arena internacional. Sobre una base slida de amistad, debemos seguir adelante, fortalecer nuestra cooperacin, teniendo en cuenta las condiciones actuales”.

Cuba rinde pleitesa a Putin en el mismo momento que ha iniciado un acercamiento estratgico con EEUU, incluso a los pocos das de haber mantenido recibido en La Habana a funcionarios estadounidenses y de haber llegado a primeros acuerdos en materia migratoria, en lo que observadores en ambos pases atisban como los prembulos de un nuevo deshielo. En octubre, los migrantes cubanos fueron los ms numerosos en cruzar el Ro Grande y atravesar la frontera sur con Mxico: casi 30.000. Adems, casi 2.000 balseros llegaron al “imperio yanqui” tras lanzarse al mar desde la isla desde el pasado 1 de octubre.

Daz-Canel no dud en aferrarse a la propaganda rusa para asegurar que “este conflicto ha sido creado y tiene su origen lamentablemente manipulado por el Gobierno de EEUU ante la opinin pblica internacional”, adems de denunciar el “inadmisible avance de la OTAN hacia las fronteras” rusas. Llevado por el entusiasmo, el elegido por Ral Castro apost por la dotes didcticas de Putin e invit a quienes le siguen a difundir el discurso impartido por el presidente ruso cuando se anexion las cuatro regiones ucranianas. Una prctica, la de magnificar discursos, muy revolucionaria.

“Ratificamos una vez ms el amor que Cuba siente por Rusia”, pontific el presidente cubano, a sabiendas de que es un ms un deseo que una realidad. Los cubanos siempre han mirado a rusos y soviticos con distancia, como si no tuvieran mucho que ver al margen de la propaganda. “Cada vez que Cuba se vio frente a desafos y urgencias, que parecan imposibles de resolver, la mano amiga de Rusia se extendi y gracias a ello superamos los retos. Son estas las razones por las cuales sentimos la calidez que ofrece una familia querida”, destac Daz-Canel ante la Duma Estatal de la Asamblea Federal, en la primera intervencin de un presidente cubano ante el rgano legislativo.

Los rusos han elegido la imagen ms combatiente de Fidel, como si todava estuviese luchando en las alturas de Sierra Maestra contra las huestes del dictador Fulgencio Batista. En Rusia ya no recuerdan cmo Fidel oblig a sus seguidores a gritar “Nikita (Kruschev) mariquita!”, despus de que el mandatario sovitico ordenase replegar los famosos misiles que provocaron la histrica crisis nuclear del siglo pasado con Estados Unidos. En aquellos momentos Fidel apostaba por el conflicto directo, aunque ya fuera del poder y octogenario reconoci su miedo a una guerra nuclear que acabase con el planeta.

“Fidel es el smbolo de toda una poca, la del movimiento de liberacin nacional, del fin del sistema colonial y de la creacin de nuestros estados independientes y soberanos en Amrica Latina y frica”, explic Putin, quien record sus reuniones con el lder revolucionario.

La invasin de Ucrania ha constatado cmo Rusia mantiene estrechos aliados e intereses estratgicos en el “patio trasero” de EEUU. Adems de las tres revoluciones (Venezuela, Nicaragua y Cuba), que han ayudado a extender la desinformacin del Kremlin por toda la regin, varios gobiernos como el brasileo y el argentino han mantenido buenas relaciones con Mosc en los ltimos meses.