Fidel Ramírez implicado de pies a cabeza en la trama corrupta propiciada por su hermano Rafael Ramírez en PDVSA
El doctor Fidel Ramírez Carreño, médico internista y gastroenterólogo, se desempeñó como director médico de Petróleos de Venezuela (PDVSA), también ocupó el cargo de director del Hospital Militar de Caracas y fue uno de los médicos personales del fallecido Hugo Chávez mientras estuvo enfermo.
Fidel Ramírez, junto a su hermano Rafael Ramírez, expresidente de PDVSA se encuentran involucrados en un esquema de lavado de capitales procedentes de la estatal petrolera.
Según la fiscalía del Sur de New York, fue hallado culpable como participe clave en una red de lavado de dinero en la que figuraba una empresa a través de la cual el doctor Fidel obtuvo millonarias ganancias.
La compañía fue identificada como KTC Cumaná II Internacional en Venezuela que operaba junto a Miami Equipment & Export Co en Florida, la fiscalía determinó que lavó millones de dólares lo cuales eran depositados en cuentas de funcionarios enchufados al clan chavista entre 2010 y 2016 bajo el alegato de pagos por servicios y consultorías.
La trama de lavado de dinero consistió en que los dueños de Miami Equipment & Export Co, Luis Diaz y Luis Javier Diaz, padre e hijo, reportaron ingresos por más de $150 millones, de los cuales $106 millones fueron enviados desde Venezuela por KTC, según contratos con Bariven (filial de PDVSA) encargada de las importaciones, ventas de equipos y materiales relacionados a la rama petrolera.
Dichos contratos fueron firmados Rafael Ramírez quien figuraba como presidente PDVSA, usando facturas falsas para respaldar los supuesto servicios de los funcionarios emitiéndolas desde Caracas a nombre de Miami Equipment & Export Co y sedepositaban en cuentas bancarias creadas en paraísos fiscales.
No obstante, para evitar que las autoridades rastrearan los pagos Miami Equipment & Export Co suprimió su nombre en los registros oficiales de las operaciones financieras, entre las que destacaba la empresa Adinar Internacional Limited, quien resultó ser de los enchufados Blas Herrera, Enrique Pradella, Antonio Padrin, Mario Herreras, los mismos dueños de KTC, la cual recibió transferencias de fondos ilícitos por de $37 millones, que llegaron a las cuentas de los hermanos Ramírez.