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Más de 9,3 millones de guatemaltecos están llamados este domingo a votar y elegir al próximo presidente del país para los próximos cuatro años.
La exprimera dama, Sandra Torres, lo enfrentará en una segunda vuelta electoral con el diputado Bernardo Arévalo, hijo del expresidente reformista Juan José Arévalo.
Para Torres, este es el cuarto intento de llegar a la presidencia y la tercera vez en segunda vuelta, luego de perder en 2019 ante el actual presidente Alejandro Giammattei y en 2015 ante Jimmy Morales.
En las elecciones del 25 de junio, Torres y su partido Unión Nacional de la Esperanza (UNE) obtuvieron el primer lugar con el 15,7 por ciento de los votos, mientras que Árevalo obtuvo el 11,8 por ciento, destaca Xinhua.
El diputado izquierdista Movimiento Semilla fue la gran sorpresa de esta elección, primera vez que aspiraba a la presidencia, luego de abandonar en 2019 a la candidata de su partido para dar paso a la fiscal Thelma Aldana.
Arévalo fue ratificado por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Guatemala como participante en esta segunda vuelta, pese a las gestiones del Ministerio Público de Guatemala, que investiga supuestas irregularidades en el registro legal de Semilla.
Ambos candidatos ingresan a esta segunda vuelta con varias promesas de combatir la corrupción en el estado de Guatemala y tomar medidas para mejorar la seguridad del país, que se ve amenazado por la actividad de las pandillas y el narcotráfico.
Guatemala registró una tasa de 17 homicidios por cada 100.000 habitantes en 2022, lo que, sumado a la actividad delictiva de las pandillas, lo ubica como uno de los países más violentos de la región centroamericana.
Los solicitantes hicieron hincapié en mejorar la asistencia social para combatir la pobreza que, según datos del Banco Mundial, afecta a más de la mitad de su población.
Para estas elecciones, el TSE activó 3.482 centros de votación en todo el país y en los consulados de Guatemala en el exterior, principalmente en Estados Unidos.
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