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El presidente francés, Emmanuel Macron, instó el viernes a los fabricantes de defensa a impulsar la producción y la innovación mientras Europa lucha por aumentar las entregas de armas para fortalecer a Ucrania.
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Desde la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022, Macron ha presionado a la industria de defensa para que pase al “modo de economía de guerra”, reiterando su llamamiento durante una visita a la base naval de Cherburgo, en el noroeste de Francia.
“Debemos amplificar la transformación que hemos iniciado” para responder más rápidamente a las necesidades de Ucrania en su guerra contra Rusia, dijo Macron en su discurso de Año Nuevo ante las fuerzas armadas francesas.
“No podemos permitir que Rusia piense que puede ganar”, añadió Macron, advirtiendo que “una victoria rusa significaría el fin de la seguridad europea”.
“Nunca más debemos conformarnos con plazos de producción que se extiendan a lo largo de varios años”, afirmó el presidente.
Dijo que los fabricantes de defensa deberían aumentar su velocidad y volumen mientras innovan.
Macron elogió las armas de “alta calidad” de Francia, pero subrayó que el país no había producido ni innovado lo suficiente en el pasado, lo que, según él, provocó “una forma de entumecimiento suficiente”.
“Este mundo ya no permite eso”, dijo.
Macron dijo que algunas empresas de defensa habían tardado en comprender “la importancia de poder cumplir rápidamente” y “a veces habían incumplido contratos durante los últimos 18 meses, lo cual lamento”.
El jueves, Ucrania advirtió que su ejército se enfrentaba a una escasez de municiones “muy real y apremiante”.
La Unión Europea había prometido entregar un millón de proyectiles para principios de 2024, pero los legisladores del Parlamento Europeo dicen que hasta ahora solo se han entregado 300.000.
Un informe del Senado francés publicado el miércoles dijo que París y otros gobiernos europeos “no estaban a la altura del desafío” de satisfacer las necesidades de municiones de Ucrania.
El año pasado, Francia adoptó un presupuesto militar de 413.000 millones de euros (450.000 millones de dólares) para 2024-2030, su mayor aumento de gasto en décadas.
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