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Congreso del Partido Comunista
El presidente chino asegurar en el Congreso del Partido Comunista un tercer mandato que no se vea desde la muerte de Mao Zedong en 1976
Mirando hacia el este y cubriendo un rea de 150.000 metros cuadrados en la plaza de Tiananmen, asoma el Gran Saln del Pueblo, un mastodonte complejo baado en mrmoles de colores y techos dorados estalinistas donde la lite poltica china se rene para decidir el futuro de la segunda potencia mundial. El domingo tocaba arrancar con la madre de todos los eventos en el calendario poltico: el 20 Congreso del Partido Comunista Chino, el ms importante en cuatro dcadas porque el secretario general del partido, el presidente Xi Jinping, asegurar un tercer mandato que no se vea desde la muerte de Mao Zedong en 1976.
En las entraas del poder chino estaba EL MUNDO para presenciar desde el palco del anfiteatro del hemiciclo, en la segunda planta, justo a la izquierda de una torna de diplomticos extranjeros, la apertura de un congreso, celebrado cada lustro y con una semana de duracin, donde se dar a conocer un nuevo equipo de liderazgo supervisado por el omnipresente Xi. Tambin servir como faro para guiar todas las polticas nacionales durante los prximos cinco aos.
Un ejrcito de hombres trajeados con pinganillo y mascarillas no dejaban ni asomar la cmara del mvil por el acantilado que separa el anfiteatro de los periodistas de la planta noble donde estaban los 2.296 delegados que representan a todos los niveles de la jerarqua del partido en 34 provincias y regiones: jefecillos de aldeas, hasta deportistas olmpicos, astronautas o campesinos. Su presencia da color al evento, que no votos reales.
Porque la reorganizacin del partido la deciden los 370 polticos que estaban subidos al escenario y que integran el Comit Central del PCCh, rgano dirigente en un sistema unipartidista. En la primera fila destacaban los 25 miembros del poderoso Politbur y camuflados entre ellos costaba ubicar a los llamados “siete magnficos”, los mandamases del Comit Permanente, con Xi Jinping a la cabeza.
“Democracia de proceso completo”
La sesin de apertura del congreso fue ms desaborida que un cocido madrileo sin garbanzos. Hay ms tensin e improvisacin en una partida a la brisca. El rey de la fiesta tambin lo fue de los sermones: 1 hora y 45 minutos estuvo Xi Jinping leyendo 14.400 palabras sobre sus dogmas del “socialismo moderno con caractersticas chinas” que caan al auditorio cual palabra divina, una que quedar forjada en la enmendada Constitucin del partido en cuanto termine el congreso.
La ronda ms larga de aplausos a Xi fue cuando reiter, como otras tantas veces, su promesa de “completar la reunificacin de China”, en clara referencia a Taiwan, la isla autnoma que Pekn considera una provincia separatista de la que tarde o temprano tomar el control. “No renunciaremos al uso de la fuerza y tomaremos todas las medidas necesarias para detener todos los movimientos separatistas”, dijo el presidente chino. “La resolucin del problema de Taiwan es un asunto del propio pueblo chino, que debe ser decidido por el pueblo chino”, aadi.
Xi tambin se acord de su otro “hijo” dscolo, Hong Kong, para decir que el modelo “un pas, dos sistemas”, que otorga a la ex colonia britnica cierto grado de autonoma, es el “mejor mecanismo institucional” y que es fundamental mantener el principio de “slo los patriotas gobiernan Hong Kong”.
El presidente chino prometi fortalecer las fuerzas armadas, mejorar su equipamiento, tecnologa y capacidad estratgica, adems de incrementar el control del partido sobre el ejrcito para asegurarse de que siempre “est alineado con el partido”. El lder se acord de sus promesas medioambientales y asegur que promovera el “desarrollo verde, bajo en carbono y mayores controles de contaminacin”, usando el carbn de una manera ms limpia y eficiente.
Tambin destac un par de veces el concepto de “democracia de proceso completo”, insinuando que la nica democracia que funciona es la que promociona el partido, el cual debe “ejercer un control firme sobre la ideologa, asegurndose de que los medios expongan los valores correctos y fomenten una generacin de jvenes influenciados por la cultura tradicional, el patriotismo y el socialismo”. Para Xi es importante “construir una cultura socialista fuerte e influir en los jvenes y promover esa cultura en el mundo”.
En su largo discurso tambin se acord de la religin, pero para enfatizar en que China continuar su impulso para “sinizar la religin” y dirigir de manera proactiva la adaptacin de la religin y la sociedad socialista”. Y otra frase destacada fue cuando prometi que “China no se involucrar en ningn tipo de expansionismo y est comprometida con su poltica de apertura al mundo exterior”.
Poltica de Covid cero
A Xi lo escuchaban atentamente los 25 miembros del Politbur, de los cuales, 11 de ellos, adems del presidente, han superado la edad de jubilacin no oficial de 68 aos impuesta, al igual que la regla de los dos mandatos, por el lder reformista Deng Xiaoping para romper con el fanatismo ideolgico concentrado en un individuo que se perpetua en el poder, como ocurri con Mao. Pero Xi rompi con todo al abolir el lmite de dos mandatos en 2018. El prximo domingo, casi la mitad de los escaos del Comit Central cambiarn de manos. Tambin se espera el reemplazo de algunos hombres fuertes del Comit Permanente.
Para cubrir el congreso de un opaco partido poltico con 101 aos de historia -que lleg al poder hace 73 aos-, hay 2.500 periodistas acreditados, entre ellos 700 reporteros extranjeros. Muchos corresponsales se han marchado de China en los ltimos dos aos por el hasto a las restricciones por la inmutable poltica de Covid cero, que sigue confinando ciudades con millones de habitantes por un puado de positivos. Pero para hacer bulto, el Gobierno chino ha procurado invitar a decenas de periodistas de medios latinoamericanos, africanos y de Oriente Medio que no tienen base en Pekn.
Todos ellos cumplieron la correspondiente cuarentena de 10 das en una habitacin de hotel antes de poder pasear con libertad por la capital. Para poder asistir a la apertura del congreso, adems haba que hacer una cuarentena desde el viernes en una especie de circuito cerrado donde los periodistas solo podan desplazarse del hotel al centro de prensa en autobuses puestos por la organizacin; se coma en comedores con mesas separadas por mamparas de plstico y haba que hacerse una PCR diaria.
En el auditorio del Palacio del Pueblo, debajo del escenario donde estaban los lderes, haba algunos rostros conocidos para el pblico chino entre los delegados elegidos. Estaba Zhong Nanshan, un veterano experto en enfermedades infecciosas que ha liderado la batalla contra el coronavirus. Tambin la astronauta Wang Yaping, la segunda mujer china en ir al espacio y los medallistas olmpicos de invierno Wu Dajing (patinador) y Xu Mengtao (esquiador).
Todos ellos son parte del paisaje de una fiesta coreografiada que culminar con un cambio de cromos en una lite poltica china que seguir bajo la batuta del mismo director de orquesta.
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